SENDERO DE LUZ

Salud

El estrés, la presión social o económica, la muerte o enfermedad deun ser querido, las pérdidas, las decepciones o la soledad no elegidapueden desencadenar una inhibición del sistema inmunológico y portanto abrir la puerta para una infinidad de enfermedades en nuestro cuerpo

La felicidad está a tu alcance

Alcanzar la felicidad es, con frecuencia, la meta de la mayoría delos seres humanos.Está camuflada detrás de otros nombres y de otros valores (como labondad, la honestidad, la armonía, la solidaridad, la amistad o elamor), pero conseguir la felicidad es el valor más importante detodos nosotros.Estar bien, enriquecerse como persona, estar en paz y armonía, serhonesto con uno mismo, hacer el bien a los demás, ser justo ygeneroso, etc… son otras maneras de expresar esos mismos sentimientos.Descubrir los valores que nos animan y la importancia que cada uno deellos tiene para nosotros es sencillo ya que podemos descubrirlo através de nuestros actos, analizando nuestros comportamientos ydándonos cuenta de las prioridades que establecemos entre ellos antesituaciones concretas.De esta manera, si entre nuestros valores se encuentran, por ejemplo,la amistad y la justicia, y nos encontramos en una situación en laque tenemos que elegir, nos daremos cuenta de cual de ellos es másimportante para nosotros.Si en un momento dado, un amigo nos pide que realicemos algo injustoo deshonesto y accedemos a ello estaremos dando prioridad a eseprimer valor. Si, por el contrario, no lo hacemos, impondremos elvalor de la justicia sobre el de la amistad. No obstante, encualquiera de los dos casos estaremos obrando en consecuencia ysabremos que la elección es la adecuada si con ello conseguimos lafelicidad.De esas prioridades que establezcamos entre nuestros valores dependela percepción que tenemos del mundo y, por tanto, de la misión quecreemos que debemos desempeñar en él.La visión que tenemos del mundo puede definirse como la idea que elniño que hay en nosotros tiene de lo que debería ser el mundo enrealidad, el mundo como cada uno quisiera que fuese.Esta visión es siempre necesariamente utópica e irrealizable pero detodos modos es la que nos ayuda a seguir adelante ya que nuestramisión en la vida es conseguir transformar el mundo de acuerdo connuestros valores prioritarios, conseguir un nuevo mundo más acordecon nuestros ideales.Ante el desaliento que la lucha por los ideales genera, disponemos deuna figura que nos apoya y nos atiende ante el desánimo: el mentor.Cada uno de nosotros puede tener nuestro propio mentor: un personajehistórico, un amigo, un familiar, incluso objetos o elementos de lanaturaleza como el mar o el fuego que simbolicen los valores másimportantes para nuestra visión del mundo. Además, cada persona puedetener uno o varios mentores a los que recurrir en los malos momentos.Esta técnica de los mentores ha sido llamada también "Técnica deResonancia" ya que estos personajes se encuentran en resonancia connuestros propios valores y actúan como recursos ante lasdificultades. Además, estos mentores se convierten en verdaderosejemplos, en modelos a imitar, en representaciones que modelannuestra personalidad.Básicamente existen tres grandes componentes que podemos modelar:el comportamiento.los valores.los metaprogramas.Teniendo en cuenta estos tres factores, y sin desatender ninguno deellos podemos establecer una estrategia del éxito para nuestra vida,una modelación de los diferentes aspectos que influyen en ella conrespecto a unos mentores que nos van a orientar en cada una de lasdecisiones que debamos tomar. No obstante, este es un proceso, uncamino hacia nuevas competencias, no la meta final. Es unprocedimiento que exige un constante esfuerzo un aprendizaje, peroque sin duda nos ayudará a conseguir lo que todos queremos: lafelicidad.¿Quién dice que no se puede cambiar el tiempo a voluntad?En el modelo de cambio en el que nos basamos se pretende siemprepasar de un estado presente a un estado deseado, tendiendo un puentehacia el futuro. En PNL estamos acostumbrados a "viajar en eltiempo", remontándonos al pasado, viviendo el presente yproyectándonos hacia el futuro.Está claro que el pasado y el futuro no existen mas que en nuestraimaginación y que lo único que podemos moldear es el presente. Peropodemos reorganizar el pasado, codificándolo de otra manera ennuestro interior, y podemos construir nuestro futuro. Pero dondesiempre trabajamos es en nuestro presente.Cada persona tiene una forma diferente de codificar el paso deltiempo, aunque, en general, el cerebro humano codifica el tiempo deforma espacial, situando el pasado y el futuro fuera de nosotros y elpresente en nuestro propio centro. Grabamos las imágenes, los sonidosy las sensaciones de una determinada manera, diferente en cada uno denosotros, y esa forma de grabar las informaciones nos condicionanuestro espacio vital, nos crea una relación diferente con nuestravida y con el mundo que nos rodea. A eso en PNL le llamamos la Lineadel Tiempo.Existen muchas posibilidades, pero, en general, podemos concretar lasdiferentes maneras de estructurar la Línea del Tiempo: hay personasque tienen la línea del tiempo de detrás hacia adelante (pasadodetrás, futuro delante) o al revés -dentro del tiempo-. Otraspersonas tienen la Línea del Tiempo de izquierda a derecha (izquierdapasado, derecha futuro) o al revés -a través del tiempo-.Por último,algunas personas tienen la Línea del Tiempo en forma de U (pasado enla rama izquierda de la U, futuro en la rama derecha) o al revés obien, el pasado arriba y el futuro abajo, o al revés. Existen tantasposibilidades como seres humanos. En cualquier caso, el presentesiempre ocupa el espacio central, allí donde estamos situados.Si les preguntamos a varias personas cómo saben distinguir, porejemplo, entre cuando se han levantado de la cama esta mañana, cuandose levantaron hace una semana o cuando lo hicieron hace un año, esdecir, cómo distinguen en el tiempo actividades cotidianas, nosdaremos cuenta de que sus respuestas son diferentes y que sitúan elrecuerdo (imágenes, sonidos o sensaciones) en distintos sitios delespacio alrededor de ellos. Los recuerdos más lejanos tendrán unascaracterísticas diferentes de los más cercanos. La semana pasadaestuve con un cliente que tenia dificultades porque no sabía si yahabía hecho algo o todavía no (por ejemplo, lavarse los dientes). Sucodificación era espacial, pero además, sus acciones se ibandifuminando, desdibujando, desenfocando, a medida que pasaban lashoras o los días. Fué fácil hacerle saber si ya había hecho algo otodavía no, símplemente fijándose en dónde tenía esa imagen situadaen el espacio y si estaba enfocada o no. Es decir, cada Línea delTiempo tiene sus propias submodalidades (luz, brillo, enfoque, etc)Cuando una persona sigue angustiándose por sucesos del pasado, lo quesuele ocurrir es que espacialmente mantiene esos recuerdos en la zonadel presente, por lo que revive esas sensaciones una y otra vez. Simandamos esos recuerdos hacia el pasado, la persona se acordará de lasituación, pero no tendrá sensaciones sobre la misma. Una cosa esrecordar algo y otra muy distinta sentir la misma sensación. Lo mismoocurre si esa persona se imagina cosas del futuro, cosas que todavíano han sucedido. Si hacemos que extienda su linea de futuro y sitúelas posibilidades del futuro espacialmente alejada de ella, lassensaciones también desaparecerán.No hay Líneas del Tiempo buenas o malas. Pero hay personas que vivenangustiadas porque su Línea del Tiempo está agolpada en el presente,recordando continuamente todas sus sensaciones desde que nacieron. Oque viven sin futuro, sin proyectos. Es como si su presente estuvierainvadido por el pasado y/o por el futuro. Una Línea del Tiempo bienestructurada nos da sensación de paz, de tranquilidad, de tener lasensación de que el tiempo transcurre de forma ordenada y equilibrada.