La mentira
No bebas el veneno de la adulación,
apartarte de él.
No confíes en las personas que te alaban sin motivos.
Muéstrate abierto a la crítica honesta
y ciérrate a la falsa cortesía.
La crítica a nuestros actos
puede convertirse en la voz de alerta
que necesitamos para nuestro mejoramiento.
Los elogios no merecidos
nos perjudican y nos crean ilusiones.
No hay nada tan frágil
como una persona que vive de sus propias ilusiones .
Posted at 4:47 a.m. | Etiquetas: Reflexiones |
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1 comentarios:
conozco a unos cuantos aduladores y algunos de muy de cerca, me dan asco, son mas falsos que un billete de 3 euros y siempre se mueben por intereses, en la política mexicana y mundialabundan.
saludos Luz
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