El Perdón
La cuestión no es
perdonar muchas veces, sino perdonar siempre. La infinita capacidad divina de perdonar
debe convertirse en modelo para los seguidores y seguidoras de Jesús. El perdón
es la consecuencia del amor y el amor no tiene límite. Jesús, imagen de cómo es
el Padre, nos enseña lo que es el perdón y cómo perdonar. No hay nada más
liberador y más exigente que el amor-perdón gratuito y sin límite hacia todo y
hacia todos. Como el de Jesús.
En Jesús el perdón
está presente no sólo en sus palabras sino –sobre todo- en sus obras, en
su vida. Perdona constantemente y hace del perdón uno de los temas básicos de
su predicación y de su actuación habitual. No es cuestión de números y
contabilidad, sino de cambio de mentalidad.
No tenemos que llevar
cuenta de las ofensas que nos hacen, o que creemos que nos hacen, ni de las
veces que hemos perdonado mostrándonos generosos.
El perdón a los demás no es
la condición para que Dios nos perdone, sino la consecuencia de sentir y
disfrutar el amor y el perdón de Dios
Posted at 4:12 a.m. | Etiquetas: Meditacion, Psicologia, Reflexiones |
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