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Meditar
Meditar es encontrar el camino que lleva a volver a sí mismo, a descubrir que hay en cada uno. Meditar es permanecer en silencio. En un silencio fuera de palabras, de pensamientos, de sentimientos. Meditar es permanecer. En una quietud. sin hacer, sin movimiento, sin actividad. Es ser, sin hacer. Meditar es permanecer en el ser interior. Quieto y en silencio. Hallar sin buscar.
¿Cómo meditar?
¿Cómo meditar?
No se puede enseñar a meditar. Las personas aprenden a meditar por sí mismas. Sin embargo, la presencia de un maestro aportará conocimientos valiosos para acercar al practicante hasta las puertas de la meditación. Atravesarla, dependerá de cada quién.Las practicas corporales y respiratorias previas a la meditación, pueden ser muy valiosas para liberar las tensiones y favorecer condiciones adecuadas. Sin embargo, otras personas prefieren sumergirse directamente en los ejercicios internos sin pasar por la corporeidad como la concentración visual o mental en un objeto, una virtud, una imagen; recitar mantras, afirmaciones u oraciones. Es decir que, entre los preludios dinámicos y estáticos existen infinitos caminos para llegar, y solo resta que cada uno escoja el suyo propio.
Beneficios de la meditación
Meditar produce un estado fisiológico de profunda relajación y al mismo tiempo de estar despierto y alerta. Disminuye el ritmo metabólico, cardíaco y respiratorio, por lo tanto, hay menor consumo de oxígeno y eliminación de dióxido de carbono. A su vez, se modifican las ondas cerebrales, produciéndose ondas alfa (ocho o nueve por segundo) y la respuesta fisiológica del organismo es la opuesta a la ansiedad o el miedo y diferente a los estados hipnóticos. La teoría sobre éstas modificaciones es que durante el estado meditativo hay una focalización a una sola cosa, y por lo tanto, es una simplificación inusual al estrés de la vida cotidiana.
Prof. Graciela A. Dominguez
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