El desarraigo juvenil ante la elección vocacional
Por: Adriana Virginia Sosa Terradas
La temática del desarraigo como consecuencia de los valores sustentados a partir de la modernidad ha sido una problemática que he desarrollado con anterioridad en mi trabajo El sentido del hogar desde el Análisis Existencial: una experiencia clínica. En este artículo retomo la misma temática impulsada nuevamente por la motivación de pensarla a partir de mi experiencia clínica. Son mis pacientes con sus angustias preguntas, miedos y búsquedas que me incitaron a intentar abordar una particular forma de desarraigo: la que se produce cuando los jóvenes que viven en el interior de nuestro país llegan a Buenos Aires con la intención de estudiar una carrera universitaria es decir la denominada Migración Interna. Cada uno a pesar de sus diferentes historias de vida presentaba sin embargo, ciertos denominadores comunes tanto desde sus vivencias psicológicas como desde sus motivos de consulta. Mi deseo de ayudarlos y acompañarlos en esta etapa especial de sus vidas me condujo a esbozar ciertas estrategias que quiero compartir desde mi experiencia logoterapéutica como aporte a la comprensión de una edad de la vida en la cual la elección vocacional y la consolidación de la identidad suponen los mayores desafíos.Considero que la concepción del Análisis Existencial y la Logoterapia de la persona como un ser ontológicamente abierto a los otros y al mundo que lo rodea son la base desde la cual partir para poder comprender los efectos psicológicos que el desarraigo del lugar natal produce en algunos jóvenes que llegan a una ciudad donde lo impersonal y anónimo priman por sobre lo próximo e íntimo.En la búsqueda de fundamentos teóricos del sentir el desarraigo quiero presentarles el pensamiento de Georg Simmel.Georg Simmel nació en 1858 en Berlín. Su vida académica se caracterizó por su ubicación periférica en la universidad ya que ocupó cargos docentes de poca importancia y fue nombrado profesor titular sólo unos meses antes de su muerte en 1918. Hasta entonces había trabajado como docente de seminarios en la universidad de Berlín y su salario dependía de los pagos realizados por los estudiantes. Sin embargo fue un docente muy popular y sus clases no sólo eran presenciadas por estudiantes sino también por la elite intelectual de Berlín. De esta formaSimmel ocupó un lugar central en el debate intelectual alemán desde 1890 hasta el fin de la guerra. Sus ideas fueron capaces de sintetizar la tradición historicista de Dilthey y el kantismo de Rickert. Resulta notable observar la influencia de su pensamiento en la cultura científica y filosófica alemana del siglo XX. Autores tan diferentes como WeberHeideggerJaspersSchelery Blockentre otrosfueron claramente influidos por su obra.Simmel se doctoró en filosofía en 1881 con una tesis sobre Kant. Sus conocimientos se extendían desde joven por la historiala filosofíala psicología y las ciencias sociales. Fue un prolífico escritor pues escribió una gran cantidad de trabajos y artículos sueltospero su principal contribución se encuentra en el ámbito de la sociología, especialmente en el análisis de los procesos de individualización y socialización. Su concepción de la realidad social a partir de la “filosofía de la vida” de Dilthey representó un paso fundamental en la superación de la interpretación positivista de la sociedad. Las principales obras de Simmel: Diferenciación Social (1890)Problemas de la filosofía de la historia (1892)Introducción a la ética (1893)Filosofía del dinero (1900)Sociología (1908)Cuestiones fundamentales de sociología (1917) y El conflicto de la cultura moderna (1918)entre otros.Una de las primeras ideas del pensamiento simmeliano es la antítesis entre la vida entendida como un flujo que impulsa a los seres vivos y la forma que organiza y estructura las realidades. Para Simmel la tragedia de la cultura es el triunfo de la forma, representada por la cultura objetiva que reduce a la cultura subjetiva y lleva al sujeto a la desazón y al desarraigo en medio de la indolencia producto de los cambios e incertidumbres del "alma pública".Para Simmel los sentimientos se instalan en un espacio protegido que reacciona frente a las amenazas de la vida urbana tal cual aparece en su obra Las grandes urbes y la vida del espíritu.En este último artículo los sentimientos aparecen en la estima de un valor espiritual único e intransferible. Se emparenta la pequeña aldea campesina al sentimiento a los ritmos y estratos más profundos del alma versus las grandes ciudades asentadas en el entendimiento y el desprecio de la esfera sentimental.Simmel sostiene que las grandes ciudades están sumergidas en un mismo tono emocional de excitabilidad general, de shock ante la profusión de vivencias y experiencias que hace del migrante un “hombre de raíces amputadas” en el cual la desazón y la angustia se manifiestan como sentimientos generados por un entorno extraño e inhumano. En la gran ciudad se extienden las libertades de los individuos lo cual no es sinónimo de bienestar y el relativismo de los valores que impone la mas a lo cual produce una urgencia de inmediatez que “desvitaliza” todos los procesos de la vida. Esto se manifiesta en la necesidad de “hacerse notar y ser original” a costa de cualquier medio con el fin imaginario de salvaguardar la propia personalidad.
¿Qué lleva a los jóvenes a abandonar sus pueblos o ciudades, sus familias y amigos para ir a las grandes urbes?Considero que hoy en día la idea de “hombre económico” ha absorbido totalmente al hombre yen este aspecto la gran urbe supone el acceso a la ciencia, la técnica y al consumo, necesidades que cualquier joven que quiera sobrevivir en esta aldea global debe tener en claro. Esto supone que no sólo deba superar su situación de migrante dentro de los límites de su propia tierra sino considerar además su posibilidad de ser un inmigrante en lugares en los cuales las necesidades anteriormente mencionadas se vean satisfechas al estilo “primer mundo”.Propongo hacer un ejercicio de imaginación: imagínese ser un joven del interior de la Argentina que llega por primera vez a vivir Buenos Aires. El tránsitolos rostros desconocidos que van y vienen sumergidos en la urgencia del hacerlos ruidoslos estímulos de carteles luminosos, el miedo de que cualquiera que nos cruce pueda transformarse en un potencial agresor, la soledadel extrañar lo conocido, la necesidad de autopreservación…
En todos los pacientes que atendí con esta problemática pude distinguir las siguientes etapas:
1. La elección o no elección (mandato familiar) de la vocación
2. La determinación de tener que mudarse a Buenos Aires a estudiar porque esa carrera no existe en sus lugares de origen
3. Establecerse en Capital algunas veces, primero en pensiones estudiantiles y posteriormente en departamentos alquilados o comprados por sus padres. Generalmente en ciertos barrios típicos de la ciudad: Barrio Norte, Belgrano, Caballito, etc
4. Período de sobreadaptación a lo nuevo (la facultad, compañerosel ritmo de estudio el extrañar) en el que según lo que pude observar el psiquismo se exige “estar bien”. Durante este período generalmente el rendimiento es bueno o muy bueno por una necesidad de satisfacer a los padres y sobre todo el esfuerzo que ellos realizan para que sus hijos puedan estudiar en Buenos Aires
5. Período de apatía en el que aparece una merma en el rendimiento: temor a rendir los exámenes, angustia, somatizaciones y en algunos casos depresión reactiva
6. Luego de un tiempo en que los padres no entienden qué pasa con sus hijos es cuando generalmente se produce la consulta psicológica.
El motivo de consulta por el que acuden esen la mayoría de los casos, el fracaso que se produce en el estudio (no dan los parciales o no los aprueba no no se atreven a presentarse a los exámenes finales). Cuando empiezo a indagar en la historia clínica aparece como denominador común las siguientes vivencias:
* Un cuestionamiento de la elección vocacional en la que lo único realmente seguro era la necesidad de tener que emigrar a Bs. As. a estudiar una carrera universitaria*
Una incapacidad de haber generado vínculos con gente de Capital: se vinculaban con amigos de su ciudad natal o con gente del interior
* Una imposibilidad de que los vínculos amorosos prosperen porque: si eran de su lugar natal, la distancia los perjudicaba, y si eran de Bs. As.el miedo al otro desconocido o el temor a irse algún día impedía todo proyecto.* Una sensación de anonimato muy marcada de “ser nadie” en la gran ciudad que les generaba sentimientos de enojo y frustración. En sus lugares de origen eran“el hijo/la hija de…” El enojo se expresaba en la mayoría en sus vínculos familiares.* Dudas con respecto al futuro: ¿deberían volver una vez recibidos a su lugar natal o quedarse donde hubiese más posibilidades laborales?* Angustia por los síntomas psicofísicos que estaban experimentando: apatía, trastornos en la alimentación, el sueño y/o la sexualidad, fobias, tristeza sin motivos, retraimiento general de la energía vital.
INTERVENCIÓN LOGOTERAPÉUTICA
La intervención desde la logoterapia se focalizó en las problemáticas anteriormente mencionadas, utilizando las siguientes técnicas:
Siguiendo el pensamiento de Frankl, el sufrimiento hace clarividente al ser humano en el mejor de los casos. Su sentido es aumentar nuestra capacidad existencial de comprensión de lo esencial, por lo tanto el estado en el que llegan estos jóvenes al consultorio es tierra fértil para revisar aspectos importantes de su historia, su constitución familiar, sus elecciones y mandatos y el desafío propio de esta edad evolutiva de enlazar la vocación con la misión que cada uno de nosotros debe cumplir en la vida. Por lo tanto las primeras entrevistasa demás de estar orientadas a generar un vínculo de confianza y apertura son indispensables para la construcción de una vasta historia vital.Una vez que aparecen esclarecidos aspectos de la vida que desconocían o tendencias que actuaban desde lo inconciente generando actitudes contra la propia personael siguiente (y fundamental) paso en toda psicoterapia es que nuestros pacientes sean concientes de que existen alternativas.
El abordaje de la búsqueda de alternativas sobre todo en lo que respecta al conflicto relacional, se trabaja a partir del ejercicio: Mis Posibilidades (Fabry2001) que consiste en tres momentos: “Me siento entrampado por” “Mis alternativas son” y “Consecuencias del cambio (ventajas y desventajas)”. La conclusión de este trabajo es que en la vida es preferible que el sufrimiento advenga como consecuencia de haber actuadoy no por estar paralizado para no sufrir. No se puede dejar la vida “congelada” esperando el mejor momento, el desafío consiste en vivir cada momento con las posibilidades a pleno. Con respecto a la sensación que les produce el anonimato en la gran ciudad trabajamos esta percepción de la identidad por el estatus que han conseguido sus padres: les planteo el desafío de dejar de ser “el hijo/a de” y llegar a ser ellos mismos. La pregunta disparadora es: ¿Quién soy y quién quiero llegar a ser?¿Cuáles son mis debilidades y cuáles mis fortalezas?¿Qué me hace distinto a la gente que me rodea que sea una virtud para compartir?¿Qué valores o normas familiares quiero conservar y cuáles quiero desechar para construir mi personalidad? En muchos casos descubro que el fracaso en el avance en la carrera es expresión del miedo a un futuro en el que tendrán que decidir dónde establecerse. En esos casos propongo a los pacientes un ejercicio de derreflexión en el que se imaginen como un bebé lleno de confianza en la vida que no sufre por lo vendrá sino que enfrenta cada momento sin pensar en el próximo pasito a pasito…
El ser humano es un ser que naturalmente se proyecta pero muchas veces esta necesidad se transforma en una actitud imaginariamente controladora con respecto al futuro y la vida está llena de “encuentros novedosos” que van guiando nuestro caminar. Lo que sí es necesario tener en claro es lo que nunca haríamos por traicionar nuestros valores y la capacidad que tenemos de asumir el riesgo de vivir como herramientas siempre listas para tomar una decisión. Con respecto a los síntomas psicofísicos estos van desapareciendo a medida que vamos trabajando los conflictos anteriormente mencionados aunque siempre pido controles médicos para descartar factores biológicos que puedan estar influyendo.
Uno de los postulados fundamentales de la Logoterapia es que los seres humanos no debemos hacerle preguntas a la vida sino que debemos darle respuestas con nuestra actitud ante las circunstancias que nos toca afrontar. Yo suelo confrontar a mis pacientes con su posibilidad más que de quejarse de la gran ciudad de humanizarla de recordar los valores y actitudes fundamentales que los que vivimos alienados en el vértigo hemos olvidado pero que sin embargono dejan de ser caricias para nuestra alma. Pero¿cómo se puede humanizar una gran ciudad?¡Es una utopía! suelen responderme.
Una posible respuesta quizás sea empezar por nuestro núcleo más íntimo buscar que el prójimo sienta que yo puedo ser distinto cordial, amoroso, cálido y sensible a lo que le sucede y que él también a su vez me pueda enseñar cómo sobrevivir en un mundo en el que los sentimientos han sido reemplazados por una emocionalidad superflua y vacía.
Dar y recibir como una larga cadena de favores… ¿no?Yo a pesar de que vivo en una gran ciudad elijo seguir viviendo con utopías o quién sabe con esperanza… ¿y vos?
FabryJoseph (2001) Señales del camino hacia el sentido. Ediciones LAGMéxico
FranklVíktor E. (2001) Psicoterapia y Existencialismo. Herder EdBarcelona.
LukasElisabeth (2004) Logoterapia. Ed.PaidósBuenos Aires.
OropezaMariano (2004) Aportes para la reconstrucción de una teoría del sentir en Simmel. Revista del Consejo Profesional de SociologíaAño IINro. 2Buenos Aires.
SimmelGeorg (1923) El conflicto de la cultura moderna. Publicación de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad de Córdoba. Argentina.
Sosa Terradas Adriana (1995) El sentido del hogar desde el análisis existencial: una experiencia clínica. Revista Logoteoria TerapiaActitud Noviembre de 1995 Nro 21.Ediciones Fundación Argentina de Logoterapia “Víktor E. Frankl”Buenos Aires.
La temática del desarraigo como consecuencia de los valores sustentados a partir de la modernidad ha sido una problemática que he desarrollado con anterioridad en mi trabajo El sentido del hogar desde el Análisis Existencial: una experiencia clínica. En este artículo retomo la misma temática impulsada nuevamente por la motivación de pensarla a partir de mi experiencia clínica. Son mis pacientes con sus angustias preguntas, miedos y búsquedas que me incitaron a intentar abordar una particular forma de desarraigo: la que se produce cuando los jóvenes que viven en el interior de nuestro país llegan a Buenos Aires con la intención de estudiar una carrera universitaria es decir la denominada Migración Interna. Cada uno a pesar de sus diferentes historias de vida presentaba sin embargo, ciertos denominadores comunes tanto desde sus vivencias psicológicas como desde sus motivos de consulta. Mi deseo de ayudarlos y acompañarlos en esta etapa especial de sus vidas me condujo a esbozar ciertas estrategias que quiero compartir desde mi experiencia logoterapéutica como aporte a la comprensión de una edad de la vida en la cual la elección vocacional y la consolidación de la identidad suponen los mayores desafíos.Considero que la concepción del Análisis Existencial y la Logoterapia de la persona como un ser ontológicamente abierto a los otros y al mundo que lo rodea son la base desde la cual partir para poder comprender los efectos psicológicos que el desarraigo del lugar natal produce en algunos jóvenes que llegan a una ciudad donde lo impersonal y anónimo priman por sobre lo próximo e íntimo.En la búsqueda de fundamentos teóricos del sentir el desarraigo quiero presentarles el pensamiento de Georg Simmel.Georg Simmel nació en 1858 en Berlín. Su vida académica se caracterizó por su ubicación periférica en la universidad ya que ocupó cargos docentes de poca importancia y fue nombrado profesor titular sólo unos meses antes de su muerte en 1918. Hasta entonces había trabajado como docente de seminarios en la universidad de Berlín y su salario dependía de los pagos realizados por los estudiantes. Sin embargo fue un docente muy popular y sus clases no sólo eran presenciadas por estudiantes sino también por la elite intelectual de Berlín. De esta formaSimmel ocupó un lugar central en el debate intelectual alemán desde 1890 hasta el fin de la guerra. Sus ideas fueron capaces de sintetizar la tradición historicista de Dilthey y el kantismo de Rickert. Resulta notable observar la influencia de su pensamiento en la cultura científica y filosófica alemana del siglo XX. Autores tan diferentes como WeberHeideggerJaspersSchelery Blockentre otrosfueron claramente influidos por su obra.Simmel se doctoró en filosofía en 1881 con una tesis sobre Kant. Sus conocimientos se extendían desde joven por la historiala filosofíala psicología y las ciencias sociales. Fue un prolífico escritor pues escribió una gran cantidad de trabajos y artículos sueltospero su principal contribución se encuentra en el ámbito de la sociología, especialmente en el análisis de los procesos de individualización y socialización. Su concepción de la realidad social a partir de la “filosofía de la vida” de Dilthey representó un paso fundamental en la superación de la interpretación positivista de la sociedad. Las principales obras de Simmel: Diferenciación Social (1890)Problemas de la filosofía de la historia (1892)Introducción a la ética (1893)Filosofía del dinero (1900)Sociología (1908)Cuestiones fundamentales de sociología (1917) y El conflicto de la cultura moderna (1918)entre otros.Una de las primeras ideas del pensamiento simmeliano es la antítesis entre la vida entendida como un flujo que impulsa a los seres vivos y la forma que organiza y estructura las realidades. Para Simmel la tragedia de la cultura es el triunfo de la forma, representada por la cultura objetiva que reduce a la cultura subjetiva y lleva al sujeto a la desazón y al desarraigo en medio de la indolencia producto de los cambios e incertidumbres del "alma pública".Para Simmel los sentimientos se instalan en un espacio protegido que reacciona frente a las amenazas de la vida urbana tal cual aparece en su obra Las grandes urbes y la vida del espíritu.En este último artículo los sentimientos aparecen en la estima de un valor espiritual único e intransferible. Se emparenta la pequeña aldea campesina al sentimiento a los ritmos y estratos más profundos del alma versus las grandes ciudades asentadas en el entendimiento y el desprecio de la esfera sentimental.Simmel sostiene que las grandes ciudades están sumergidas en un mismo tono emocional de excitabilidad general, de shock ante la profusión de vivencias y experiencias que hace del migrante un “hombre de raíces amputadas” en el cual la desazón y la angustia se manifiestan como sentimientos generados por un entorno extraño e inhumano. En la gran ciudad se extienden las libertades de los individuos lo cual no es sinónimo de bienestar y el relativismo de los valores que impone la mas a lo cual produce una urgencia de inmediatez que “desvitaliza” todos los procesos de la vida. Esto se manifiesta en la necesidad de “hacerse notar y ser original” a costa de cualquier medio con el fin imaginario de salvaguardar la propia personalidad.
¿Qué lleva a los jóvenes a abandonar sus pueblos o ciudades, sus familias y amigos para ir a las grandes urbes?Considero que hoy en día la idea de “hombre económico” ha absorbido totalmente al hombre yen este aspecto la gran urbe supone el acceso a la ciencia, la técnica y al consumo, necesidades que cualquier joven que quiera sobrevivir en esta aldea global debe tener en claro. Esto supone que no sólo deba superar su situación de migrante dentro de los límites de su propia tierra sino considerar además su posibilidad de ser un inmigrante en lugares en los cuales las necesidades anteriormente mencionadas se vean satisfechas al estilo “primer mundo”.Propongo hacer un ejercicio de imaginación: imagínese ser un joven del interior de la Argentina que llega por primera vez a vivir Buenos Aires. El tránsitolos rostros desconocidos que van y vienen sumergidos en la urgencia del hacerlos ruidoslos estímulos de carteles luminosos, el miedo de que cualquiera que nos cruce pueda transformarse en un potencial agresor, la soledadel extrañar lo conocido, la necesidad de autopreservación…
En todos los pacientes que atendí con esta problemática pude distinguir las siguientes etapas:
1. La elección o no elección (mandato familiar) de la vocación
2. La determinación de tener que mudarse a Buenos Aires a estudiar porque esa carrera no existe en sus lugares de origen
3. Establecerse en Capital algunas veces, primero en pensiones estudiantiles y posteriormente en departamentos alquilados o comprados por sus padres. Generalmente en ciertos barrios típicos de la ciudad: Barrio Norte, Belgrano, Caballito, etc
4. Período de sobreadaptación a lo nuevo (la facultad, compañerosel ritmo de estudio el extrañar) en el que según lo que pude observar el psiquismo se exige “estar bien”. Durante este período generalmente el rendimiento es bueno o muy bueno por una necesidad de satisfacer a los padres y sobre todo el esfuerzo que ellos realizan para que sus hijos puedan estudiar en Buenos Aires
5. Período de apatía en el que aparece una merma en el rendimiento: temor a rendir los exámenes, angustia, somatizaciones y en algunos casos depresión reactiva
6. Luego de un tiempo en que los padres no entienden qué pasa con sus hijos es cuando generalmente se produce la consulta psicológica.
El motivo de consulta por el que acuden esen la mayoría de los casos, el fracaso que se produce en el estudio (no dan los parciales o no los aprueba no no se atreven a presentarse a los exámenes finales). Cuando empiezo a indagar en la historia clínica aparece como denominador común las siguientes vivencias:
* Un cuestionamiento de la elección vocacional en la que lo único realmente seguro era la necesidad de tener que emigrar a Bs. As. a estudiar una carrera universitaria*
Una incapacidad de haber generado vínculos con gente de Capital: se vinculaban con amigos de su ciudad natal o con gente del interior
* Una imposibilidad de que los vínculos amorosos prosperen porque: si eran de su lugar natal, la distancia los perjudicaba, y si eran de Bs. As.el miedo al otro desconocido o el temor a irse algún día impedía todo proyecto.* Una sensación de anonimato muy marcada de “ser nadie” en la gran ciudad que les generaba sentimientos de enojo y frustración. En sus lugares de origen eran“el hijo/la hija de…” El enojo se expresaba en la mayoría en sus vínculos familiares.* Dudas con respecto al futuro: ¿deberían volver una vez recibidos a su lugar natal o quedarse donde hubiese más posibilidades laborales?* Angustia por los síntomas psicofísicos que estaban experimentando: apatía, trastornos en la alimentación, el sueño y/o la sexualidad, fobias, tristeza sin motivos, retraimiento general de la energía vital.
INTERVENCIÓN LOGOTERAPÉUTICA
La intervención desde la logoterapia se focalizó en las problemáticas anteriormente mencionadas, utilizando las siguientes técnicas:
Siguiendo el pensamiento de Frankl, el sufrimiento hace clarividente al ser humano en el mejor de los casos. Su sentido es aumentar nuestra capacidad existencial de comprensión de lo esencial, por lo tanto el estado en el que llegan estos jóvenes al consultorio es tierra fértil para revisar aspectos importantes de su historia, su constitución familiar, sus elecciones y mandatos y el desafío propio de esta edad evolutiva de enlazar la vocación con la misión que cada uno de nosotros debe cumplir en la vida. Por lo tanto las primeras entrevistasa demás de estar orientadas a generar un vínculo de confianza y apertura son indispensables para la construcción de una vasta historia vital.Una vez que aparecen esclarecidos aspectos de la vida que desconocían o tendencias que actuaban desde lo inconciente generando actitudes contra la propia personael siguiente (y fundamental) paso en toda psicoterapia es que nuestros pacientes sean concientes de que existen alternativas.
El abordaje de la búsqueda de alternativas sobre todo en lo que respecta al conflicto relacional, se trabaja a partir del ejercicio: Mis Posibilidades (Fabry2001) que consiste en tres momentos: “Me siento entrampado por” “Mis alternativas son” y “Consecuencias del cambio (ventajas y desventajas)”. La conclusión de este trabajo es que en la vida es preferible que el sufrimiento advenga como consecuencia de haber actuadoy no por estar paralizado para no sufrir. No se puede dejar la vida “congelada” esperando el mejor momento, el desafío consiste en vivir cada momento con las posibilidades a pleno. Con respecto a la sensación que les produce el anonimato en la gran ciudad trabajamos esta percepción de la identidad por el estatus que han conseguido sus padres: les planteo el desafío de dejar de ser “el hijo/a de” y llegar a ser ellos mismos. La pregunta disparadora es: ¿Quién soy y quién quiero llegar a ser?¿Cuáles son mis debilidades y cuáles mis fortalezas?¿Qué me hace distinto a la gente que me rodea que sea una virtud para compartir?¿Qué valores o normas familiares quiero conservar y cuáles quiero desechar para construir mi personalidad? En muchos casos descubro que el fracaso en el avance en la carrera es expresión del miedo a un futuro en el que tendrán que decidir dónde establecerse. En esos casos propongo a los pacientes un ejercicio de derreflexión en el que se imaginen como un bebé lleno de confianza en la vida que no sufre por lo vendrá sino que enfrenta cada momento sin pensar en el próximo pasito a pasito…
El ser humano es un ser que naturalmente se proyecta pero muchas veces esta necesidad se transforma en una actitud imaginariamente controladora con respecto al futuro y la vida está llena de “encuentros novedosos” que van guiando nuestro caminar. Lo que sí es necesario tener en claro es lo que nunca haríamos por traicionar nuestros valores y la capacidad que tenemos de asumir el riesgo de vivir como herramientas siempre listas para tomar una decisión. Con respecto a los síntomas psicofísicos estos van desapareciendo a medida que vamos trabajando los conflictos anteriormente mencionados aunque siempre pido controles médicos para descartar factores biológicos que puedan estar influyendo.
Uno de los postulados fundamentales de la Logoterapia es que los seres humanos no debemos hacerle preguntas a la vida sino que debemos darle respuestas con nuestra actitud ante las circunstancias que nos toca afrontar. Yo suelo confrontar a mis pacientes con su posibilidad más que de quejarse de la gran ciudad de humanizarla de recordar los valores y actitudes fundamentales que los que vivimos alienados en el vértigo hemos olvidado pero que sin embargono dejan de ser caricias para nuestra alma. Pero¿cómo se puede humanizar una gran ciudad?¡Es una utopía! suelen responderme.
Una posible respuesta quizás sea empezar por nuestro núcleo más íntimo buscar que el prójimo sienta que yo puedo ser distinto cordial, amoroso, cálido y sensible a lo que le sucede y que él también a su vez me pueda enseñar cómo sobrevivir en un mundo en el que los sentimientos han sido reemplazados por una emocionalidad superflua y vacía.
Dar y recibir como una larga cadena de favores… ¿no?Yo a pesar de que vivo en una gran ciudad elijo seguir viviendo con utopías o quién sabe con esperanza… ¿y vos?
FabryJoseph (2001) Señales del camino hacia el sentido. Ediciones LAGMéxico
FranklVíktor E. (2001) Psicoterapia y Existencialismo. Herder EdBarcelona.
LukasElisabeth (2004) Logoterapia. Ed.PaidósBuenos Aires.
OropezaMariano (2004) Aportes para la reconstrucción de una teoría del sentir en Simmel. Revista del Consejo Profesional de SociologíaAño IINro. 2Buenos Aires.
SimmelGeorg (1923) El conflicto de la cultura moderna. Publicación de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad de Córdoba. Argentina.
Sosa Terradas Adriana (1995) El sentido del hogar desde el análisis existencial: una experiencia clínica. Revista Logoteoria TerapiaActitud Noviembre de 1995 Nro 21.Ediciones Fundación Argentina de Logoterapia “Víktor E. Frankl”Buenos Aires.
Posted at 5:56 a.m. | Etiquetas: Psicologia |
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