Reflexión
Cuando la bendición toca a la puerta de tu corazón, no tengas dudas de que pediste por ella en algún momento de tu vida.
A veces lo que deseamos parece no llegar nunca, pero hay que recordar que no siempre sabemos pedir.Aprende a pedir por ti, por tu armonía, por tu alegría.
Aprende a pedir el mejor camino, aquél donde el pasto crece verde y abundante, donde la luz ilumina y hace conocer, donde el amor sucede, floreciendo por sí mismo.
No te abandones a una vida vacía, sin propósito.
Pide amor, pide paciencia y pide comprensión.
Para que en cada momento puedas crecer porque amas, puedas estar en paz porque sabes el momento de la espera y puedas caminar seguro porque aprendiste el arte de la comprensión.
Sé fiel a tu intuición, a tu corazón y camina...
Todo viene a tiempo para aquellos que saben pedir con amor y confianza.
Posted at 4:20 a.m. | Etiquetas: Reflexiones |
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