Sin ti también estoy bien
Dedicado
a aquellos que aman demasiado.
Nadie
puede dar lo que no tiene...
Sólo
cuando estás bien contigo mismo, puedes estar bien con los demás.
Necesitas
valorarte para valorar, quererte para querer, respetarte para respetar y
aceptarte para aceptar, ya que nadie puede dar lo que no tiene dentro de sí.
Ninguna
relación te dará la paz, que tu mismo no hayas creado en tu interior.
Ninguna
relación te brindará la felicidad, que tú mismo no construyas.
Sólo
podrás ser feliz con otra persona cuando seas consciente que eres feliz incluso
cuando no está a tu lado.
Sólo
podrás amar siendo independiente, hasta el punto de no tener que manipular ni
manejar a los que dices querer.
Dos
personas que se unen por el deseo de hacerse feliz la una a la otra, fracasarán
con el tiempo…
Dos
personas que se unen con el fin de compartir su felicidad propia, lograrán una
felicidad duradera, y sin ser su fin, harán feliz a la otra.
Para
amar necesitas una humilde autosuficiencia, necesitas autoestima y la práctica
de una libertad responsable.
Pretender
que otra persona nos haga felices y llene todas nuestras expectativas es una
fantasía narcisista que sólo trae frustraciones.
Por
eso, ámate mucho, madura, y el día que puedas decirle al otro:
“Sin ti
también estoy bien”… ese día estarás más preparado para vivir en pareja.
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