Terapias naturales: descubrir nuestro interior

El gran maestro Anthony De Mello nos enseñó que no debemos vivir en el pasado ni en el futuro. La realidad es el presente, un presente que debe ser enriquecido por la meditación y la espiritualidad.
Sin embargo, esto parece un proyecto casi utópico en el conflictivo mundo moderno, caracterizado principalmente por la agitación vana, por una prisa que rara vez lleva a alguna parte.
Por supuesto que, muchas veces, no tenemos tiempo (ni inclinación) para hacer de vez en cuando un retiro espiritual o un curso de autoconocimiento. Pero, por qué no transformar cada día, cada hora incluso, en una oportunidad para observarnos, para conocernos y para buscar aquello que nos ayude a trascender? Y por otra parte, es bueno recordar que las cosas sólo serán cuando deban ser, por mucha prisa que nos demos.
Debemos conciliar entonces dos necesidades de la mujer y del hombre de hoy: ayudarnos a recordar que reparar en quienes nos rodean y escucharlos como seres nuevos con un corazón abierto es la mejor manera de acercanos a la verdad; y también permitirnos un espacio y un tiempo para la reflexión, para el pensamiento iluminador que, tarde o temprano, dará frutos de paz y alegría.
Porque, como bien escribió un poeta, "todo debe suceder... siempre".
Silvia González

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