La influencia del plano astral en la canalización
por
Gerrit Gielen
2012 se acerca a su
final. Se hace dolorosamente claro que casi todas las predicciones referidas a
este año -muchas de ellas, canalizadas- no se han cumplido. Ni grandes
desastres naturales, ni la inversión de los polos, ni la ascensión en masa, ni
el cataclismo de Niburu, ni la Federación Galáctica, ni la llegada de un
maestro mundial... por mencionar sólo unas cuantas.
En apariencia, se ha
canalizado mucha información falsa. ¿Cómo puede ser? ¿No recibe el canalizador
una inspiración superior? ¿Nos engañan quienes canalizan, o están confundidos
por su propia imaginación? No es tan sencillo.
Los canalizadores, por
lo regular, creen en lo que hacen, y se sorprenden sinceramente cuando sus
predicciones no se cumplen. Suelen ser gente sensitiva, dotada con dones
paranormales, capaces de ponerse en contacto con entidades no físicas, y están
convencidos de que esas entidades les proporcionan información confiable y
valiosa.
Entonces, ¿qué es lo
que va mal?
Un problema importante
es el plano astral que nos rodea.
¿Qué es el plano
astral? ¿Cómo se formó?
Tras la muerte, somos
libres. Libres de regresar al plano espiritual donde nos originamos, libres de
crear nuestra propia realidad. Pero esa libertad puede ser una trampa. Muchos
no son libres en lo más profundo. Están aprisionados por creencias rígidas
sobre lo bueno y malo, la vida y la muerte, y lo que sucede tras la muerte.
Otros no están tan apegados a determinadas creencias, pero sí a emociones y
deseos, como las adicciones, la ira, o sentimientos de inferioridad.
El plano astral es,
entre otras cosas, la creación conjunta de todas esas personas. Es un plano
social de existencia en el que todos esos pensamientos de miedo, ilusión y
deseo toman forma instantáneamente. Si tenemos muchos pensamientos sombríos,
podríamos encontrarnos en un territorio desolado y gris.
Ese territorio refleja
nuestro estado interior. La gente permanece en el plano astral hasta que la
llamada de su alma se hace tan fuerte que abandonan las ilusiones y ascienden
al plano espiritual o, si eso no fuera posible, retirarse a dormir y volver a
encarnarse.
Por ejemplo: si alguien
piensa que llegará a una “ciudad dorada” después del momento de su muerte,
donde la gente caminará exaltando y alabando a Dios, entonces ahí será donde
lleguen, esa persona y otras que crean lo mismo. Al comienzo, serán felices
allí; creerá estar en el cielo. Pero, en algún momento, la vida se les hará
aburrida y monótona; la “ciudad dorada” se transformará en una prisión. Gracias
a esta experiencia, se abre un espacio interno en el que la voz del alma, la
voz de la verdad, podrá escucharse de nuevo. Gradualmente, tendrá lugar un
despertar y la ilusión astral de la “ciudad dorada” será desechada.
El plano astral está
repleto de “cielos” de personas con convicciones fundamentalistas. Cuanto más
fuertes sean estas convicciones, más tiempo les llevará escuchar la llamada de
su alma. Pero no sólo hay “cielos” en el plano astral; algunas personas crean
su propio “infierno”. Alguien con un marcado sentido de inferioridad podría
encontrarse en un sitio yermo y solitario que refleja sus sentimientos. Como
antes, podría necesitar bastante tiempo antes de que esa persona permita que su
Luz interior emerja.
En resumen, el plano
astral es el sitio de reunión de aquellos que aún no se han abierto a la voz de
sus almas. Como sus convicciones no están arraigadas en la sabiduría del alma,
crean su propia prisión basándose en esas convicciones.
¿Cómo influye el plano
astral sobre psíquicos y canalizadores? Hay dos vías.
1.- El ciclo del miedo
El plano astral está
formado, en parte, por nosotros, los vivos; en particular por nuestras
emociones más fuertes, como la ira o el miedo. Como plano, el astral está
próximo al plano de la Tierra, en el sentido de que muchos de los miedos y
prejuicios humanos que prevalen en aquel encuentran su equivalente en los
miedos y sesgos que existen en la Tierra, en la conciencia colectiva de la
humanidad. Por ejemplo, cuando la gente de la Tierra teme los desastres
naturales, en las regiones bajas del astral surge todo tipo de imágenes de
desastres naturales. Estas imágenes de destrucción pueden ser percibidas por
personas con talentos paranormales, quienes las interpretan como señales del
futuro y las presentan a su público como verdades elevadas.
Además, en la parte
baja del astral vagan todo tipo de entidades que no terminan de dejar ir la
Tierra. A algunas de estas entidades les gusta transmitir imágenes de miedo,
porque les hace sentir importantes. A menudo, son difuntos que no pueden dejar ir
la Tierra; su conciencia está aun completamente enfocada en la Tierra, y el
reconocimiento y la atención de los humanos es muy importante para ellos.
Necesitan el contacto con la gente, y si esa gente comienza a verlos como
mensajeros de verdades elevadas, algunos no podrán resistirse. Divulgarán
cualquier cosa que refuerce su estatus de gran mensajero. Sienten
instintivamente que hacer predicciones espectaculares les funciona muy bien:
cuanto mayor sea el desastre que anuncian, más atención tendrán. El miedo
original, que ya estaba presente en la conciencia colectiva de la humanidad, se
ve así reforzado por entidades astrales. De esa forma, se crea un ciclo de
miedo.
Debido a este ciclo de
miedo, alimentado por humanos y fuerzas astrales, puede suceder, y de hecho
sucede, que la gente se reúna en torno a un gurú, que crea honradamente que
canaliza un conocimiento superior, cuando lo único que hace es confirmar su
visiones atemorizadas, al tiempo que las presenta como transmisiones del más
allá. Muchas de las predicciones sobre 2012, especialmente las que hablan de
desastres, pueden explicarse así.
2.- Gurús astrales
En algún momento, el
desarrollo espiritual de la humanidad provocará la desaparición del plano
astral. Una vez que la gente haya sintonizado con su alma, con su verdad
interior, y escuchen a sus corazones en lugar de a sus egos, el plano astral no
tendrá con qué alimentarse. El plano astral prospera gracias a las ilusiones y
a emociones inferiores; la verdad y el amor significarán su muerte.
En este momento, sin
embargo, hay entidades en el plano astral que han morado allí por un largo
tiempo y han adquirido una posición especial. En un “cielo” fundamentalista
(pensemos en la “ciudad dorada” que mencionábamos antes), a menudo hay un único
líder, un gurú erigido a sí mismo, que se ve a sí mismo como la voz de la
verdad. Esa persona basa su estatus de la posición especial que ostenta en el
plano astral. Durante siglos, esa persona puede haber adoptado la clase de una
famosa personalidad religiosa; por ejemplo, Cristo.
Incluso pueden haberse
convencido de que son el Cristo. Esto será confirmado por sus seguidores,
claro, que piensan que en el cielo fundamentalista deberían estar cerca de
Cristo. Naturalmente, ese gurú astral afirma que recuerda todos los detalles de
la vida de Cristo. En todos los cielos fundamentalistas de origen cristiano, y
hay muchos, siempre hay un Cristo de este tipo. Esto explica, por ejemplo, por
qué se canaliza tanta información contradictoria sobre la vida de Cristo.
Sin embargo, un gurú
astral de este tipo nunca está completamente alejado de la realidad. Es
consciente de que el crecimiento espiritual de la humanidad representa una
amenaza para él, y tratará de impedirlo. Para ello, enviará información a la
Tierra que refuerce el miedo y la dualidad. Esta información puede llegar en
forma de canalización, por ejemplo. Como estas entidades a menudo poseen un
conocimiento sofisticado y perspicaz acerca de la naturaleza humana, a menudo
cuesta reconocer esa información como impura. Aún más, esas entidades suelen
creer en la exactitud de su información. La muy humana capacidad para el
autoengaño es aún mayor en el plano astral que en la Tierra. En la Tierra
existe la continua confrontación con los hechos o con voces disidentes, pero
esto no es así en el planto astral; allí, todo cambio debe venir del interior
de los individuos.
¿Cómo reconocer la
información como impura?
La información pura
procede del plano del alma, del plano espiritual: un plano de unidad, amor,
libertad, respeto por todo cuanto vive. La información pura conmoverá nuestros
corazones, y nos dará una sensación inmediata de paz, amor y libertad. Nos hace
sentirnos bien en el universo en el que vivimos; nos proporciona una sensación
de confianza en nosotros mismos. La información pura conduce a una comprensión
real de quiénes somos.
La intención de la
información impura siempre es frustrar el desarrollo espiritual de la
humanidad, y reforzar el plano astral al crear nuevas ilusiones y miedos. La
información impura tiene las siguientes características:
-La información impura
proclama la dualidad: “Eso es malo, esto es bueno; aquellos están equivocados;
hay conspiraciones contra la humanidad; van a ocurrir desastres”, etc.
¿Por qué se divulga
esta información? El plano espiritual es un plano de unidad; detrás de cada
expresión de espíritu que vemos fuera de nosotros, hay un centro de unidad que
compartimos todos. La iluminación significa ser plenamente consciente de esa
unidad. Pensar en términos de dualidad -del tipo que sea- aparta al ser humano
de esta unidad, de su luz interna.
-La información impura
presiona y es coercitiva: “Debes hacer esto o aquello para ser puro; asegúrate
de que estás listo para los cambios que van a ocurrir; deberías trabajar a
fondo en ti mismo, porque de otra forma las cosas se te pondrán difíciles”,
etc.
¿Por qué se dice esto?
El alma te conecta con la unidad, con El Todo. Para estar en contacto con uno
mismo, hay que aprender a escuchar al alma. Esto sólo puede hacerse libremente.
La voz del alma es suave, no exigente. La presión y la coerción alejan al ser
humano de su alma.
-La información impura
invoca el miedo: “Van a tener lugar desastres; debes unirte a nosotros o todo
irá mal; ten cuidado con esto o aquello, etc.”. La voz del alma es de amor, no
de miedo. Alentar a la gente a escuchar la voz del miedo los saca de su centro.
-La información impura
no está centrada en el aquí y ahora: se dan fechas específicas de sucesos
futuros, o se cuenta por enésima vez la historia cósmica de la humanidad.
Acostumbran a ser interesantes, pero no se dice nada claro sobre la vida aquí y
ahora.
El desarrollo
espiritual siempre tiene lugar ahora. Al sacar a la gente a su conciencia del
ahora, se entorpece su desarrollo espiritual.
-La información impura
te hace sentir mal contigo mismo: Si no estás de acuerdo con cierto texto, se
da por sentado que eres tonto e ingenuo, y que aún no estás iluminado.
Cuando la gente cree
que eso es cierto, confiarán menos en su intuición y su guía interna. Esto
también frena el desarrollo espiritual natural.
-Los informantes
impuros declaran que son el único canal auténtico, el más puro. Afirman que
tienen acceso privilegiado a información que sólo puede recibirse a través de
ellos. En el momento en que se quiere hacer creer a la gente que hay una
autoridad espiritual externa a ellos, y que sabe más, se les niega su propia
luz.
Para acabar
Canalizar es un talento
entre otros: pintar, escribir, o un talento musical. El don de canalizar no
hace mejor a una persona que a otra, no más que otros dones. También, los
canalizadores no son autoridades en asuntos espirituales o éticos.
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