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Sobre la Ley de Atracción
Ahora que se ha puesto de moda la Ley de Atracción, y la película El Secreto, algunas personas se preguntan si de verdad es tan mágica como 
parece y sobre todo, porque cuando tratamos de sintonizarnos en positivo, las cosas salen mal.
La Ley de atracción siempre actúan, seamos concientes o no de ello, siempre atraemos lo que es afín a nosotros. Pero también hay algo importante, no todo en la vida es Ley de Atracción en el sentido de que si pensamos en positivo, las cosas se realizan. Además de pensar en positivo, también interfieren las demás Leyes Universales tales como la ley del karma, dharma y hasta nuestra propia energía, nuestros chakras y por supuesto, también nuestras creencias más arraigadas las cuales viven en nosotros aunque no las veamos o no nos demos cuenta que existen.
Lo primordial para hacer efectiva la Ley de Atracción es elevarla vibración de nuestra energía a través de nuestra aura o chakras a mayor vibración, tendremos experiencias más plenas y felices y menos dolorosas. A menor vibración el sufrimiento se incrementa. A mayor vibración, más conciencia y por lo tanto hacemos efectivo el dharma y no el karma. El karma aprender lecciones de vida que no hemos aprendido todavía, lo cuál nos producirá dolor. Por ejemplo, si no has aprendido a valorarte y amarte a ti mismo, entonces atraerás a ti a personas que te hagan sufrir, que te maltraten. Estas personas son como un espejo que te reflejan no el poco amor que estas personas sienten por ti, sino el poco amor que tu sientes por ti mismo. Hasta que digas basta, hasta aquí y termines por NO ACEPTAR este tipo de relaciones, demostrarás el amor que te tienes por lo tanto, no lo volverás a sufrir HAS APRENDIDO LA LECCIÓN. Así que si tu no te amas, por mucho que pienses en positivo y digas quiero atraer a mi vida a un hombre que me ame pues éste nunca llegará. Porque la Ley de Atracción no atrae lo que decimos de dientes para afuera, sino lo que somos EN CONCIENCIA.
De igual manera sucede con el dinero, si tu deseas tener un mejor trabajo, un mejor sueldo o simplemente tener más dinero, tendrás que atraerlo transformando tu conciencia acerca del dinero. Esta conciencia no se forma de la noche a la mañana de manera mágica, hay que trabajarla internamente para irla creando. Si tu quieres mucho dinero, pero todo lo ves caro, te duele pagar en un restaurante y tienes miedo de que mañana se te acabe, y cuando alguien te menciona una cifra elevada de dinero piensas que eso es mucho para ti, entonces el dinero no te llegará, simple y sencillamente porque la cantidad que deseas o pides no esta integrada a tu conciencia, todavía la ves fuera de ti. ¿Cuándo tenemos ya una conciencia de dinero? Cuando se te hace cómodo tenerlo, por ejemplo, cuando pagas una cuenta sin que te duela, cuando te das un gusto sin culpa y cuando gastas sabiendo que siempre llegará más.
Una persona que nace en familia rica, no tiene que crear una conciencia del dinero porque ya la trae, desde que nace se adapta a un ritmo determinado de vida y esto es normal. La clase media no nace con una conciencia de riqueza, a la clase media le toca CREAR esta conciencia, por lo tanto, es un proceso que no se logra de la noche a la mañana porque cambiar la conciencia implica transformar todas las creencias que aprendimos en nuestra vida y nos hicieron una persona de clase media. Una persona de escasos recursos puede también crear una conciencia de riqueza, pero este proceso llevará un poco más de tiempo todavía.
Como decía al principio, además de la Ley de Atracción, se encuentra nuestro nivel vibratorio, nuestra conciencia, nuestro karma, dharma y por supuesto, el destino que cada persona tiene marcado, es decir, el lugar que nos tocó al nacer, nuestra familia y los aprendizajes de vida que a cada uno le corresponden.
parece y sobre todo, porque cuando tratamos de sintonizarnos en positivo, las cosas salen mal.La Ley de atracción siempre actúan, seamos concientes o no de ello, siempre atraemos lo que es afín a nosotros. Pero también hay algo importante, no todo en la vida es Ley de Atracción en el sentido de que si pensamos en positivo, las cosas se realizan. Además de pensar en positivo, también interfieren las demás Leyes Universales tales como la ley del karma, dharma y hasta nuestra propia energía, nuestros chakras y por supuesto, también nuestras creencias más arraigadas las cuales viven en nosotros aunque no las veamos o no nos demos cuenta que existen.
Lo primordial para hacer efectiva la Ley de Atracción es elevarla vibración de nuestra energía a través de nuestra aura o chakras a mayor vibración, tendremos experiencias más plenas y felices y menos dolorosas. A menor vibración el sufrimiento se incrementa. A mayor vibración, más conciencia y por lo tanto hacemos efectivo el dharma y no el karma. El karma aprender lecciones de vida que no hemos aprendido todavía, lo cuál nos producirá dolor. Por ejemplo, si no has aprendido a valorarte y amarte a ti mismo, entonces atraerás a ti a personas que te hagan sufrir, que te maltraten. Estas personas son como un espejo que te reflejan no el poco amor que estas personas sienten por ti, sino el poco amor que tu sientes por ti mismo. Hasta que digas basta, hasta aquí y termines por NO ACEPTAR este tipo de relaciones, demostrarás el amor que te tienes por lo tanto, no lo volverás a sufrir HAS APRENDIDO LA LECCIÓN. Así que si tu no te amas, por mucho que pienses en positivo y digas quiero atraer a mi vida a un hombre que me ame pues éste nunca llegará. Porque la Ley de Atracción no atrae lo que decimos de dientes para afuera, sino lo que somos EN CONCIENCIA.
De igual manera sucede con el dinero, si tu deseas tener un mejor trabajo, un mejor sueldo o simplemente tener más dinero, tendrás que atraerlo transformando tu conciencia acerca del dinero. Esta conciencia no se forma de la noche a la mañana de manera mágica, hay que trabajarla internamente para irla creando. Si tu quieres mucho dinero, pero todo lo ves caro, te duele pagar en un restaurante y tienes miedo de que mañana se te acabe, y cuando alguien te menciona una cifra elevada de dinero piensas que eso es mucho para ti, entonces el dinero no te llegará, simple y sencillamente porque la cantidad que deseas o pides no esta integrada a tu conciencia, todavía la ves fuera de ti. ¿Cuándo tenemos ya una conciencia de dinero? Cuando se te hace cómodo tenerlo, por ejemplo, cuando pagas una cuenta sin que te duela, cuando te das un gusto sin culpa y cuando gastas sabiendo que siempre llegará más.
Una persona que nace en familia rica, no tiene que crear una conciencia del dinero porque ya la trae, desde que nace se adapta a un ritmo determinado de vida y esto es normal. La clase media no nace con una conciencia de riqueza, a la clase media le toca CREAR esta conciencia, por lo tanto, es un proceso que no se logra de la noche a la mañana porque cambiar la conciencia implica transformar todas las creencias que aprendimos en nuestra vida y nos hicieron una persona de clase media. Una persona de escasos recursos puede también crear una conciencia de riqueza, pero este proceso llevará un poco más de tiempo todavía.
Como decía al principio, además de la Ley de Atracción, se encuentra nuestro nivel vibratorio, nuestra conciencia, nuestro karma, dharma y por supuesto, el destino que cada persona tiene marcado, es decir, el lugar que nos tocó al nacer, nuestra familia y los aprendizajes de vida que a cada uno le corresponden.
Harumi Puertos
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